Este jueves se acaba de registrar uno de las jugadas más insólitas del año a falta de casi la totalidad del semestre hasta las vísperas de Año Nuevo. Y tuvo lugar en el Playoff de ingreso a la zona de grupos de la UEFA Conference League, durante la victoria del Chelsea por 2-0 contra el Servette de Suiza en Stamford Bridge, que incluyó una asistencia de Enzo Fernández.
Segundos posteriores al primer tanto anotado por Christopher Nkunku de penal, el cuadro helvético buscó salir desde el fondo a través de su arquero, Jeremy Frick. El hombre de 31 años acompañó la pelota hacia el medio de la cancha y le dio la oportunidad de recuperarla a Marc Guiu con su asfixiante presión en la última línea. El juvenil de 18 años, que llegó a cambio de seis millones de euros desde el Barcelona, se impuso en el mano a mano y logró hacer rebotar el balón en su botín para que saliera disparado contra la valla contraria.
Guiu estaba en una posición muy ventajosa, ya que se encaminó a un arco desguarneciado y con el guardameta a varios metros de distancia. Parecía que nada podía estropear su primer gol oficial con la camiseta de los Blues y el tercero de su carrera profesional hasta que se produjo lo imposible. El jugador surgido de La Masía le pegó con el talón derecho de manera defectuosa y esa definición le permitió reponerse a Frick con un despeje corto. Dos veces volvió a quedar favorecido por el rebote, aunque en ninguna pudo vencer al portero.
La acción mereció un sinfín de comentarios en las redes sociales, en los cuales se destacó el mensaje de la cuenta oficial de Fox Sports México en Twitter con un ánimo de incredulidad: “¿Cómo que esto no terminó en gol?”. El periodista Nahuel Lanzón aseguró que Marc Guiu acababa “de errarse lo más insólito del 2024”. “Es realmente increíble”, comentó.
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