Decenas de miles de personas se manifestaron en Londres este sábado una semana más para pedir el alto el fuego inmediato en Gaza y el cese de la venta de armas del Reino Unido a Israel.
Los manifestantes, entre ellos el exlíder laborista Jeremy Corbyn y otros políticos y sindicalistas, empezaron su recorrido en la plaza del Parlamento para concluir en Hyde Park, donde pronunciaron discursos personalidades como el embajador palestino en este país, Husam Zomlot.
“El cambio vendrá, de campus a campus, de ciudad a ciudad, de país a país”, dijo Zomlot, en alusión a las crecientes protestas en los campus universitarios de Estados Unidos.
“La marea está cambiando porque esto es un movimiento global por el cambio, una reivindicación global del poder popular, del poder del pueblo”, agregó.
Numerosos policías vigilaron la manifestación, organizada por la Campaña de solidaridad con Palestina y que coincidió con otra más pequeña en la avenida Pall Mall de activistas proisraelíes.
Más de 600 destacados exjueces, abogados y académicos del Reino Unido pidieron el pasado 4 de abril en una carta al primer ministro, Rishi Sunak, detener el comercio de armas con Israel a fin de prevenir “el riesgo plausible de un genocidio en Gaza”, así como sancionar a quienes lo hayan incitado.
El Ejecutivo conservador declinó dar a conocer el asesoramiento legal que ha recibido sobre si el Estado israelí está violando la ley humanitaria con sus actos en la Franja.
Por otra parte, la BBC informó este sábado de que militares británicos podrían ocuparse de entregar sobre el terreno ayuda humanitaria llegada a Gaza en barcos desde Chipre, a través de un muelle temporal que está construyendo Estados Unidos en la costa gazatí.
El posible papel de los soldados conllevaría conducir los camiones con la carga desde las lanchas de desembarco por la pista flotante de cientos de metros de longitud y entregarla a un área de distribución segura en tierra firme en la Franja, explicó la emisora.
El ministerio de Defensa de Londres dijo el viernes por su parte que el barco auxiliar de la Marina británica RFA Cardigan Bay proporcionará alojamiento a los cientos de marineros y soldados estadounidenses que participan en la construcción del muelle, después de que Washington aclarara que no pisarán el territorio gazatí.
EFE