En más de 600 familias de Barcelona reina la incertidumbre ante posible crecida del río Neverí

En más de 600 familias de Barcelona reina la incertidumbre ante posible crecida del río Neverí

En más de 600 familias de Barcelona reina la incertidumbre ante posible crecida del río Neverí

 

En más de 600 familias que residen en el sector El Muro, en Barcelona, reina la incertidumbre ante la posibilidad de que el río Neverí aumente su nivel y termine anegando sus casas.

Por Javier A. Guaipo





Y es que los lugareños tienen muy fresco el recuerdo de hace poco más de un año, cuando el mencionado río se desbordó y provocó que el agua anegara sus viviendas, superando el metro de altura.

“En 16 años que llevo aquí nunca viví algo similar. Todos nos tuvimos que salir de nuestras casas porque estaban totalmente inundadas. Sin embargo, cuando bajó, todo volvió a la normalidad”, señaló Francisco Araguaney.

El vecino agregó que este año la situación ha sido diferente, pues, a pesar de que el agua no se ha introducido a los hogares, llevan al menos un par de meses con los patios totalmente cubiertos y por ende con la incertidumbre al máximo.

 

En más de 600 familias de Barcelona reina la incertidumbre ante posible crecida del río Neverí

 

“Mi casa está a unos 400 metros del propio cauce del río y aun así tengo la parte trasera full. Incluso perdí los topochos, tomates y otras legumbres que había sembrado precisamente por esta situación”, explicó.

De igual manera indicó que en los últimos días el agua había bajado un poco, pero desde la mañana de este jueves 13 de octubre comenzó a subir nuevamente.

“Incluso hemos tenido que sacar hacia la calle a las ovejas que tenemos para evitar el riesgo de que sean arrastradas por la corriente. De igual manera no dejamos que los niños salgan al patio por precaución”.

 

En más de 600 familias de Barcelona reina la incertidumbre ante posible crecida del río Neverí

 

Araguaney pidió a las autoridades competentes que provea de materiales suficientes para que las familias que tengan “ranchos de zinc” puedan levantar una vivienda de bloques que sea más resistente a las inundaciones.

“Esa sería una alternativa de ayuda. La otra sería proveer de nuevos hogares en zonas seguras, pero ahí también influye el arraigo de la gente. Tendrían que eliminar todas las casas para que no las ocupen nuevamente”.