El agua que reciben en la comunidad La Llanada en Cumaná, capital del estado Sucre, “está saliendo sucia, con color y hedionda desde hace más de dos meses”. Así lo denunciaron sus habitantes a los medios de comunicación.
Víctor Federico González // Corresponsalía lapatilla.com
Sostuvieron que la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe) no está cumpliendo con los pasos necesarios para el tratamiento de este recurso y que pueda ser apto para el consumo humano.
“Los niños y adultos mayores vienen siendo los más afectados, les da vómito, diarrea y hasta fiebre por culpa de esa agua que parece barro”, dijo uno de los denunciantes que no quiso identificarse por temor a represalias.
“El agua está saliendo muy mal tratada, y por eso tenemos que vivir comprando botellones a diario y llega un momento en el que no podemos porque los salarios no alcanzan”, comunicó Joseph Cedeño, residente del sector 2 de La Llanada.
Vale decir que esta situación se ha reportado en múltiples comunidades de la capital sucrense, sin embargo, hasta ahora ninguna autoridad de Hidrocaribe o del gobierno regional ha ofrecido alguna explicación al respecto.
En este sentido, pidieron enérgicamente a la gobernación chavista de la entidad y a Hidrocaribe que se enfoquen en resolver esta problemática que puede desencadenar un grave problema de salud pública.
El Clap no resuelve nada
Las deficiencias de los alimentos entregados por el régimen de Nicolás Maduro también representan otro problema que aqueja a los vecinos de este sector popular. Detallaron no trae proteínas y que muchas veces no trae productos como aceite o azúcar.
“Traen puros granos con mucha tierra, no meten proteínas, ni azúcar, ni aceite ni leche. Ellos creen que eso es suficiente para uno comer y la verdad es que eso no resuelve nada”, dijeron.