En un comunicado, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS por sus siglas en inglés), anunció que cancelará todos los contratos restantes para la construcción del muro en la frontera con México que fue uno de los pilares de la administración de Donald Trump.
En un comunicado, el DHS informó que utilizará el dinero actualmente asignado a ese proyecto para impulsar acciones de “planificación ambiental” y dialogará con “propietarios de tierras impactadas, las tribus, los funcionarios electos estatales y locales, y las agencias federales”.
En ese sentido, el organismo resaltó que “estas actividades no implicarán la construcción de una nueva barrera fronteriza ni la adquisición permanente de tierras”.
La decisión de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) replica una tomada en julio, cuando cancelaron dos contratos en la zona de Loredo
Este viernes, la CBP informó que “iniciará la planificación ambiental y las acciones consistentes con la Ley Nacional de Política Ambiental para los proyectos del sistema de barrera fronteriza previamente planificados ubicados dentro de los Sectores del Valle del Río Grande, Laredo y El Centro”.
El DHS además explicó que costearán todo esto con el dinero de las asignaciones para construir el muro que todavía no comenzaron, y que el Gobierno de Biden “sigue pidiendo al Congreso que cancele los fondos restantes para el muro fronterizo y que, en su lugar, financie medidas de seguridad fronteriza más inteligentes, como la tecnología fronteriza y la modernización de los puertos de entrada terrestres, que han demostrado ser más eficaces para mejorar la seguridad en la frontera”.
“Hasta que el Congreso cancele esos fondos, y a menos que lo haga, la ley exige que el DHS utilice los fondos de forma coherente con la finalidad para la que fueron asignados, y el inicio de las actividades de planificación medioambiental forma parte del plan del Departamento para hacerlo”, resaltó el comunicado.
Por último, el DHS concluyó que “este anuncio no tiene ningún impacto en los proyectos previamente aprobados y necesarios para abordar los problemas de vida, seguridad y restauración del medio ambiente en los sectores del Valle del Río Grande, San Diego y El Centro”.
La decisión del Gobierno de Biden llegó el mismo día del anuncio de que México y EEUU iniciaron este viernes una “alianza” de seguridad en la que serán “socios iguales” tras reemplazar la Iniciativa Mérida con el nuevo Entendimiento Bicentenario después del Diálogo de Alto Nivel de Seguridad bilateral.
“De una cooperación limitada vamos a una alianza, que es algo muy distinto, es superior cualitativamente. Solamente te alías con alguien en quien confías y respetas”, presumió el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en una conferencia con Antony Blinken, secretario de Estado de EEUU
El funcionario estadounidense coincidió en que se abre “un nuevo capítulo” en la cooperación en seguridad con México en el que ambos actuarán como “socios iguales”.
“Marca el inicio de un nuevo capítulo en la cooperación de seguridad entre México y Estados Unidos, trabajando como socios iguales y que define y aborda las causas raíz de retos de seguridad como la desigualdad, la corrupción y la impunidad”, aseveró.