El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, permitirá al Congreso acceder a documentos de su antecesor, Donald Trump, sobre el asalto al Capitolio del 6 de enero, en el que murieron cinco personas.
La decisión de Biden permite que los Archivos Nacionales de EE.UU., que custodian documentos históricos, entreguen información sobre el asalto al Capitolio a un comité de la Cámara de Representantes que investiga ese suceso.
Trump había argumentado que esos documentos debían permanecer en secreto porque podrían poner en peligro la seguridad nacional.
Sin embargo, en una rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, anunció este viernes que Biden había llegado a la conclusión de que la seguridad del país no estaba en peligro y los documentos debían entregarse al comité de la Cámara Baja.
El contenido exacto de esos documentos se desconoce, pero supuestamente podrían sacar a la luz qué ocurrió en la Casa Blanca mientras cientos de personas irrumpían en el Capitolio.
El comité que investiga el suceso fue creado por la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, y su misión es investigar por qué ocurrió el asalto, quién es responsable y qué puede hacerse para evitar otro suceso similar.
Con ese propósito, ha pedido acceso a documentos hasta ahora secretos, como los de Trump, y ha citado a declarar a exmiembros de su Gobierno, incluido el polémico ideólogo y exasesor Steve Bannon.
La comisión está formada por una mayoría de congresistas demócratas, aunque hay dos integrantes republicanos -Liz Cheney y Adam Kinzinger- que están enfrentados con Trump.
Los simpatizantes del exgobernante que irrumpieron en el Capitolio querían que no se certificara la victoria electoral de Biden.
Cinco personas murieron y cerca de 140 agentes fueron agredidos.
Hasta ahora, unas 550 personas han sido imputadas por cargos relacionados con el asalto de enero, incluidas 165 personas acusadas de delitos de agresión a la autoridad. EFE