Trabajadores de la salud que laboran en el ambulatorio del sector Sierra Imataca, Casacoima en el estado Delta Amacuro, tomaron la decisión de cerrar sus puertas, en señal de protesta, debido a la falta de equipos de bioseguridad, medicinas, e insumos médicos necesarios para el trato de la pandemia del Covid-19 y otras patologías.
En consecuencia, el personal de salud de dicho ha cesado sus actividades, por el estado de vulnerabilidad en el cual se encuentran, dada la situación de decidía que los aqueja por la falta de suministros médicos y de salud. Quedando en evidencia de forma pública, notoria y comunicacional que el régimen no tiene capacidad de respuesta ante la pandemia de Covid-19.
Una fuente anónima que trabaja en dicho ambulatorio y prefirió no identificarse para evitar represalias indicó que en el ambulatorio no se cuenta con ningún tipo de insumos, ni equipos médicos, “tanto el personal médico como de enfermería cuando llegan emergencias, no tienen como afrontarlas”, indicó
Asimismo, expresó que tampoco se cuenta con ambulancia, “han tenido que recurrir a vecinos para por ejemplo pedir una pastilla para controlar la tensión, han tenido que a tender partos exponiéndose a riego de contaminación, por no tener gasas y guantes quirúrgicos, no hay material de limpieza en el centro, sin contar con los constantes cortes de energía”, enfatizó.
Esta fuente, recordó la OPS donó una planta de energía que no se ha instalado aún por razones desconocidas, llegando al extremo de iluminar las emergencias con teléfonos, focos, y velas para prestar los primeros auxilios.
Destacó que en el municipio existe una sala situacional que cuenta con vehículos para el traslado de emergencias, pero llegan tarde, o no llegan, motivo por el cual se han registrado múltiples decesos. “La pregunta es: ¿ Porque siendo el ambulatorio de Sierra Imataca el centro piloto, no existe dotación para el mismo, cuando a el personal médico cubano cuenta con todas las consideraciones y hasta comercian con las medicinas?”, continuó.
En tal sentido, los médicos y enfermeras elevan su voz de protesta y dejar de tapar el sol con el dedo, ante la ola de calamidades e incluso enfermedades que padece todo el personal de salud, que no cuenta ni con una bombona de oxígeno para ayudar a una persona con problemas respiratorios.
Nota de prensa