La Junta Nacional de Seguridad del Transporte publicó este martes su informe final sobre la caída del puente de la Universidad Internacional de Florida (FIU), que causó la muerte a seis personas y heridas a ocho más el 15 de marzo de 2018.
Tras más de un año de investigaciones y conclusiones, la autoridad federal, conocida por las siglas NTSB, estimó que la causa probable del colapso “fueron los errores de cálculo de carga y capacidad cometidos por FIGG Bridge Engineers, Inc., (FIGG) en su diseño de la región nodal 11/12 del miembro principal y la conexión a la cubierta del puente.
El informe también encontró una revisión por pares inadecuada que “no pudo detectar los errores de cálculo en el diseño del puente”.
La NTSB también criticó la acción de todas las partes involucradas, incluyendo FIU y el Departamento de Transporte de Florida, por no detener el trabajo de construcción cuando las grietas alcanzaron niveles inaceptables y por no cerrar la vía en cuestión, la céntrica Calle 8 o Tamiami Trail, para evitar accidentes en la vía pública.
Según el informe, sobre las 8:00 a.m. del 15 de marzo el equipo de ingenieros de FIGG Bridge Engineers revisó la estructura y comprobó la existencia de las grietas, que hasta entonces habían visto en fotografías.
Una hora después los ingenieros sostuvieron una reunión en la que “aseguraron” a los presentes, ingenieros de FIU, la empresa constructora Munilla Construction Management LLC y el Departamento de Transporte de la Florida, que “no había preocupación acerca de la seguridad de la estructura suspendida sobre la vía vehicular”.
Más tarde, a la 1:47 p.m., FIGG ordenó reajustar la tensión de la estructuras y las 950 toneladas de hormigón que conformaban el puente cayeron sobre la calle 8 y acabaron con la vida de cinco personas que viajaban en vehículos por la zona y un obrero de la construcción que se encontraba en el lugar.