En mercado Los Cocos de Puerto La Cruz amanecen para hacer trueques

En mercado Los Cocos de Puerto La Cruz amanecen para hacer trueques

(foto Daniel Olivares)
(foto Daniel Olivares)

Habitantes de la zona norte del estado Anzoátegui se las siguen ingeniando para llevar alimentos a sus hogares desde el mercado Los Cocos de Puerto La Cruz, donde amanecen para hacer trueques. Así lo reseña eltiempo.com.ve / Giovanna Pellicani

“Aquí esperamos a los pesca­dores para cambiarles artículos regulados por pescado”.

Así el ama de casa Adriana Lozada justifica su visita diaria al expendio de productos del mar.





Ella vive en el sector Bello Mon­te de Puerto La Cruz y cuenta que todos los días acude al mercado porteño para cambiar algún rubro regulado por pescado, pues considera que es la única manera de garantizarles algo de proteína a sus seis hijos.

“Mientras mis chamos están en la escuela yo busco los alimen­tos”.

Manifestó que desde hace cin­co meses acude al lugar, porque son pocos los productos regula­dos que consigue en las colas de los abastos y supermercados de la zona.

Indicó que los trabajadores del mar que llegan en botes a la bahía de Pozuelos cambian un kilo de harina de maíz precocidad por la misma cantidad de sardina, machuelo, lamparosa, cojinúa o cualquier otra especie que consi­gan durante su faena nocturna.

La jornada de trueques se inicia a las 4:00 de la madrugada, cuando se cruzan más de 200 personas con un solo objetivo: llevar comida a sus hogares.

UNA OPORTUNIDAD

Alicia Mata es otra de las que se están acostumbrando a visitar casi a diario la pescadería muni­cipal, donde, según cuenta, ha llegado a pedir colaboración a los pescadores por carecer de pro­ductos regulados para cambiarles.

“Gracias a Dios tenemos esta opción. Yo tengo siete hijos y no los puedo dejar sin comer. Aunque mi esposo trabaja no nos alcanza el dinero para comprar alimentos”.

Recordó que en una oportu­nidad se acercó al primer bote que llegó a orillas de la playa y les pidió a sus ocupantes que le rega­laran algo de lo que traían, pues no tenía qué darles de comer a sus hijos ese día.

“Me regalaron un kilo de machuelos y con eso en mi casa comimos durante dos días, hasta que pude hacer una cola para comprar crema dental en un supermercado y la traje para que me la cambiaran por comida”.

Explicó que a los pescadores se les dificulta adquirir rubros regulados porque pasan días en alta mar, razón por la que han destinado parte de su mercancía a cambiarla por lo que necesitan.

Elio Gutiérrez es uno de los trabajadores del mar que llegan al mercado Los Cocos. Indicó que siempre han realizado ese tipo de trueques, sin embargo, consideró que la práctica se ha acentuado por la escasez de alimentos.

LLEVAN DE TODO

A la bahía de Pozuelos llegan todos los días personas con fru­tas, verduras, hortalizas y hasta electrodomésticos. Ellos van en busca de sardinas o cualquier otro rubro marino.

Los trueques comienzan a las 4:30 de la madrugada y por cuatro horas consecutivas muchos son los que se pelean por obtener la mejor variedad de pescados.