Como consecuencia de la escasez y desabastecimiento en todo el país, la figura del bachaquero cada vez cobra más fuerza en la economía de Venezuela. Aunque es una práctica de comercio ilegal, en el país la manera de encontrar lo que no se consigue en los anaqueles, es acudiendo a estos personajes que especulan a diestra y siniestra aprovechándose de la necesidad de los venezolanos.
Algunos descaradamente practican esta “profesión” en las calles del centro de Barquisimeto estado Lara, frente a la mirada indolente de las autoridades. En el mercado San Juan que opera los domingos en gran parte del centro de Barquisimeto, los usuarios pueden encontrar desde una pasta dental, un kilo de leche en polvo o repuestos para maquinas de afeitar, hasta toallas sanitarias, todo a precios exorbitantes.
En Caracas el comercio de productos de primera necesidad está a la orden del día. La redoma de Petare es el núcleo mas grande de bachaqueros a nivel nacional. Ahí se venden bienes de la cesta básica que no se ven en los anaqueles. Marcas de productos que tienen años sin aparecer en los supermercados. Por ejemplo, si usted busca aceite marca Mazeite, allí lo podrá encontrar.
Aunque el gobierno ha jurado la guerra a los bachaqueros, no ha podido contra ellos. De vez en cuando se ve una que otra detención por este delito. Sin embargo debido a esto, los bachaqueros han abierto el espectro para vender. Los servicios de mensajería instantánea como Whatsapp o Blackberry MSN, se han vuelto herramientas de suma importancia para ellos. La facilidad de enviar un mensaje en masa con los productos que ofrecen, ha hecho de estos servicios grandes aliados del bachaquero.