Gobierno ante Cidh: Es raro que medios que odian al socialismo pretendan subsidio de dólares

Gobierno ante Cidh: Es raro que medios que odian al socialismo pretendan subsidio de dólares

protesta periodistas

La Comisión Interamericana de los Derechos Humanos conoció este viernes la situación que vive actualmente el país, tras mes y medio de protestas.

El representante del Estado venezolano Luís Britto, se preguntó “¿Cómo se puede reclamar que no hay libertad de expresión, diciéndolo en Venezuela? ¿Qué dictador permite que se publique información que podría sacarlo del poder? ¿Qué dictadura permite que se convoque por los medios a una concentración contra la dictadura?”.

Afirmó que “los medios de comunicación en Venezuela se comportan como actores políticos” y que “todos los jefes de redacción determinan qué aparece y qué no aparece en el periódico”.





Con respecto al control de divisas que existe en el país, lo cual ha afectado la obtención de papel periódico para la prensa escrita, Britto dijo que “es raro que medios que odian al socialismo pretendan que el gobierno les subsidie dólares. En un país aparecen y desaparecen periódicos, dependiendo de cómo les vaya. Panorama y Últimas Noticias no tienen problemas económicos”.

Más temprano

La primera audiencia en la Cidh se centró en “situación general de derechos humanos en Venezuela”.

Durante su desarrollo, Cofavic argumentó durante su presentación que han habido 1.720 detenciones durante las manifestaciones en Venezuela. Agregaron que durante el desarrollo de las mismas se ha hecho “uso excesivo de la fuerza” y “lenguaje violento”.

Sin embargo, el Estado venezolano representado por Germán Saltrón, desestimó estas denuncias, asegurando que estas “violaciones no existen”. Pero reconociendo que han habido “excesos” por parte de fuerzas de seguridad durante las protestas. Además sostuvo que la oposición venezolana es la responsable de uso de la violencia durante manifestaciones.

Por otro lado, Saltrón expresó que “el objetivo es provocar enfrentamientos entre los venezolanos para simular una guerra civil y solicitar la intervención extranjera de militares de la OTAN y, de esta forma, terminar con la revolución bolivariana y entregar los mayores recursos petroleros del mundo a Estados Unidos”.